¿Cómo mantener la máquina exprimidora de tornillo comercial?

A medida que las personas modernas prestan cada vez más atención a la nutrición y la salud de los alimentos, muchas personas optan por reemplazar las bebidas con zumos frescos, por lo que la demanda del mercado de exprimidores ha aumentado de forma sin precedentes. Como uno de los representantes de exprimidores más vendidos, nuestro exprimidor de tornillo se ha exportado a Tailandia, Malasia, Singapur, Maldivas y otros países. El mantenimiento correcto y razonable de un exprimidor puede prolongar su vida útil, por lo que ¿cómo mantener una máquina exprimidora de tornillo comercial?

Limpieza de las piezas de la máquina exprimidora de tornillo

Apagar y enfriar: antes de realizar cualquier operación de mantenimiento, asegúrese de cortar el suministro eléctrico para garantizar la seguridad. Si la máquina se acaba de usar, espere hasta que se haya enfriado por completo antes de desmontarla para evitar quemaduras.

Desmontar las piezas: de acuerdo con las instrucciones de la máquina exprimidora de tornillo, desmonte gradualmente las piezas desmontables: tornillo, tamiz, boquilla de zumo y recolector de pulpa. Limpie todas las piezas extraíbles con agua tibia y detergente suave, evitando limpiadores abrasivos que puedan dañar las superficies.

Para las pantallas que son difíciles de limpiar, puede utilizar un cepillo de cerdas suaves o un cepillo de limpieza especial para ayudar en la limpieza y remojarlo en agua tibia si es necesario. Asegúrese de que todas las piezas estén bien enjuagadas y que no queden residuos de detergente.

Secar o limpiar en seco

Seque todas las piezas con un paño limpio o déjelas secar de forma natural para evitar daños por agua que pueden provocar oxidación. Luego vuelva a ensamblar las piezas.

Inspección y reemplazo: Verifique todas las piezas en busca de desgaste, daños o corrosión. Si es necesario, reemplace las piezas muy desgastadas, como rejillas o anillos de sellado.

Mantenimiento regular

Además de la limpieza de rutina después de cada uso, se recomienda realizar una limpieza profunda e inspección a intervalos regulares, especialmente para exprimidores de uso comercial, que pueden requerir un mantenimiento más frecuente.